Patricia Werner, coach estadounidense, afirma que el ego es una cualidad ajena a los buenos líderes y que no forma parte del ADN de una persona. Además, advierte de la delgada línea que separa al ego de la autoconfianza.
¿Cuáles son las cualidades que destacan en un líder? A priori, responderíamos que un líder ha de poseer un alto nivel de confianza en sí mismo y una elevada autoestima. Y estaríamos en lo cierto. Según la life-coach Patricia Werner, estos dos valores son los que posibilitan, por ejemplo a un director empresarial, motivar a su equipo y estimular el cumplimiento de los objetivos marcados.
“Una persona que tenga desarrollada su inteligencia emocional, su autoestima y su autoconfianza es una persona consciente de sus talentos y habilidades, capaz de mantener a su equipo motivado e impulsado hacia sus metas”, afirma Werner.
Aun así, todo líder ha de saber cómo comportarse ante su equipo, sin imponerse ni mostrar una imagen de superioridad. De lo contrario, puede conseguir unos resultados contraproducentes. A este respecto, Werner concluye que ser líder “no significa ser el mejor de los miembros del equipo, al contrario, significa tener la humildad de reconocer que sin equipo no hay resultados”.
Liderar desde la autoconfianza promueve la creatividad del líder y los integrantes del equipo, mientras que si se aboga por el ego, suelen proliferar actitudes más reaccionarias. Esta línea que separa el ego de la autoconfianza es delgada y no siempre es fácil de delimitar.
Desde la asociación de profesionales en gestión de proyectos Project Management Institute (PMI) se insiste en la idea de que ser líder es una cuestión de equipo, no de singularidad. Los términos de “trabajo en equipo” y “cooperación” adquieren un peso importante, relegando las prácticas individuales y el egocentrismo. “El ego te hace creer que tus percepciones de la realidad son la realidad y que tus interpretaciones y conclusiones son las únicas posibles. Esto hace que te quejes de todo y critiques a todos”, concluyen.
Es importante formar líderes con capacidades creativas y empáticas para que asuman liderazgos centrados en la autoconfianza, la autoestima y la inteligencia emocional, huyendo así de actitudes egocéntricas.